Muy semejante a Jóvenes Construyendo el Futuro. El plan tiene el objetivo de ayudar entre 700,000 y 800,000 jóvenes que deberían entrar en breve en el mercado del trabajo.
El gobierno francés presentó un ambicioso plan de 6,500 millones de euros (7,500 millones de dólares) para apoyar a los jóvenes a entrar en el mercado laboral en el contexto de la pandemia del coronavirus.
Entre otras medidas el gobierno ofrecerá una ayuda de 4,000 euros (4,630 dólares) para favorecer la contratación de 450,000 personas antes de enero. También está previsto crear 230,000 contratos de aprendizaje y 100,000 contratos de profesionalización.
El plan tiene el objetivo de ayudar entre 700,000 y 800,000 jóvenes que deberían entrar en breve en el mercado del trabajo “en un regreso complicado” en septiembre, dijo el primer ministro francés Jean Castex, que presentó el plan tras una visita a una planta en Besançon que forma a jóvenes trabajadores.
Para ayudar a las empresas que dudan en contratar, el gobierno creó una prima para las que contraten a un joven menor de 25 años entre agosto y enero, con un contrato de al menos tres meses y con un sueldo máximo equivalente a dos sueldos base.
El plan también recupera las ayudas que ya estaban en vigor desde el 1 de julio para promover los contratos alternos (trabajo y estudio al mismo tiempo) para los jóvenes: una ayuda de 5,000 euros (5,790 dólares) para los contratos de jóvenes de menos de 18 años y de 8,000 euros (9,270 dólares) si son mayores de edad.
El gobierno también propondrá 100,000 formaciones académicas para jóvenes que no lograron superar los estudios superiores.
Por otro lado, el país galo espera crecer 8% para el 2021, según unas declaraciones recogidas por Reuters del ministro de Finanzas francés, Bruno Le Maire, el jueves.
Le Maire afirmó ante la Asamblea Nacional que espera que la actividad económica retome el nivel precrisis en el 2022. Es decir, que el próximo año Francia no logrará despegar por completo. Le Maire también mencionó que los últimos datos macroeconómicos nacionales son “satisfactorios pero muy frágiles” para cambiar las estimaciones de una contracción de 11% este año.
También, el presidente francés, Emmanuel Macron, descartó recientemente el alza en impuestos para financiar las medidas adoptadas para contener la recesión posterior a la crisis del coronavirus, y anunció que relanzará la reforma de pensiones que quedó pendiente a causa de la pandemia.
“No se supera una crisis como esta subiendo impuestos”, indicó Macron en una entrevista televisada. El presidente francés dijo que subir los impuestos tendría efectos negativos en el consumo de los franceses y generaría dudas en la economía.
“No solucionaría nada y desanimaría a la gente de buscar un enriquecimiento a base de trabajo”, señaló Macron, quien recordó que en su programa electoral se comprometió a reducir la presión impositiva, una de las más altas de Europa.
También indicó que volverá a proponer la reforma de las pensiones, aunque lo hará de forma diferente a como lo hizo hace unos meses, cuando provocó una gran oposición de los sindicatos, quienes paralizaron en forma de protesta, importantes servicios públicos del país durante semanas.