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TODOS SOMOS “LÓPEZ”

El desprecio hacia “la prole” y el clasismo se vuelve a proyectar en el discurso impulsado desde la CÚPULA PRIÍSTA”. Basta escuchar a Enrique Ochoa dirigirse a Andrés Manuel López Obrador, con un despectivo “LÓPEZ” para darnos cuenta del soterrado pero persistente clasismo que proyecta la clase gobernante sobre nuestro pueblo. Es por ello importante visibilizar este discurso desde el discurso mismo; ser López y ser orgulloso de serlo.
Cuando la hija de Peña Nieto se refirió a los críticos de su padre como la “prole” varias personas que salieron en su defensa enarbolaron argumentos como los siguientes: “es una adolescente inmadura” o “porque tanto argüende si ya se disculpó”. En efecto, una adolescente inmadura, sí; en efecto, se disculpó, sí. Es más, pudo no haberlo dicho. El asunto es que haberlo dicho es una proyección de cómo en el discurso soterrado, manejado en los corrillos de la clase gobernante se piensa al pueblo que la sostiene.
Pues esta mirada sobre y contra el pueblo se vuelve a proyectar en el discurso priísta; Meade, con un apellido de origen extranjero, proyectado como una ventaja “social” contra un “López”, pronunciado con sorna y de manera despectiva. ¿Cuántos mexicanos,orgullosamente, son López?

Colaboración de Israel Leyva Morales

“Llevemos la fiesta en paz” escribió en su cuenta de tuiter, Alejandra Barrales, refiriéndose a los hechos violentos en Coyoacán donde huestes perredistas conocidos como “Los buitres” atacaron a ciudadanos y militantes de morena que asistían a un acto de precampaña de Claudia Sheinbaum. Antes, autoridades delegacionales trataban de deslindarse de los hechos e incluso el mismo jefe de gobierno de la Cd. de Méx., Miguel Ángel Mancera manifestó que no se permitirían actos “instigadores” de violencia y el Instituto Electoral de la ciudad, en voz de los consejeros declararon que se rompían reglas electorales.

Sin embargo, aún el saldo dejó el causante de una muerte, el de la Sra. Martha Patricia Reyes, militante de morena, personas lesionadas, reporteros acosados y golpeados como el caso de Angel Bolaños del periódico “La Jornada”; tanto unos como otros, funcionarios y dirigencia perredista, demostraron una total negligencia y complicidad ante los hechos criminales.

Esta violencia desatada en actos políticos y electorales por grupos porriles afines al PRD, donde incluso servidores públicos de la delegación Coyoacán participaron, atenta contra derechos humanos elementales, no sólo violá la ley electoral sino también va contra la libertad de expresión, de reunión, de libre tránsito y pone en riesgo toda integridad física de los ciudadanos.

Es claro que en este caso de violencia, el gobierno capitalino y el delegacional están implicados, no solo dejan de actuar como corresponde, haciendo valer las leyes amparadas en la constitución, sino que, negligentemente citan “urgentemente” a un “pacto de civilidad” para “evitar agresiones”, dejando de lado la Carta Magna.

Recordemos que este no a sido un caso aislado, en la demarcación delegacional se a suscitados diversos actos intimidatorios y violentos por los mismos actores, donde los nombres de Francisco Toledo y Raúl Flores han salido a relucir en el acoso sistemático contra brigadistas. Lo que a llevado a la dirigencia de morena en la Ciudad de México ha levantar las actas correspondientes para pedir la investigación y castigo para todos los autores.

Sabemos, como diría el filósofo F. Engels, que la violencia tiene como fin el beneficio económico, el PRD sabe que sus días “gobernando” están contados ya no podrá seguir robando, en su desesperación ya no les importa descararse y usar cualquier medio para tratar de detener el avance del cambio, de la innovación y la esperanza.

Por mas que traten de minimizar los hechos , inventen una campaña de tergiversación, o traten de legitimar la violencia, el resultado está anticipado… el PRD perderá las próximas elecciones, está dando sus últimas patadas de ahogado y estas son VIOLENTAS

@raffi_too

Hace no mucho tiempo que Bielorrusia se independizó de la URSS. Pero el pueblo no tiene nada que celebrar, ya que el asfixiante ambiente de miedo, la represión que se respira y de los escasos cambios que ha experimentado ese país. Esto es a consecuencia del único presidente que ha conocido el país, Alexander G. Lukashenko, al que se suele tildar como “el último dictador de Europa”.

Poco a poco, fue creando un país al estilo del antiguo modelo comunista basado en la limitación de la propiedad privada, la manipulación informativa, y los métodos poco ortodoxos de una policía a la que se seguiría denominando en toda una declaración de intenciones la KGB. Pero Lukashenko no sólo se inspiraría en las prácticas estalinistas y aseguró en una ocasión que las “políticas internas de Hitler tampoco estuvieron del todo mal” y eso fue lo que lo motivó a encarcelar a más de 600 personas por sus ideas políticas, así como a gobernar a golpe de decretazos y a hacer y deshacer la Constitución a su antojo. Por supuesto, todas las elecciones y referéndums celebrados no han sido más que una pantomima en las que, tal y como declaró en una ocasión el miembro de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Europeo (OSCE), Jesús López Medel, “no se deja a la oposición hacer campaña; siempre hay una fuerte presencia policial y militar en las urnas, tanto en las votaciones como en el posterior recuento; y votan hasta los muertos”. Además, entre otras cosas su país es el único de Europa en el que se permite la pena de muerte; las persecuciones contra todas aquellas religiones que no sean la ortodoxa.

Bielorrusia esta entre los treinta países del mundo con menor libertad de prensa, pero lo que resulta más escabroso de su dictadura son las continuas desapariciones, suicidios y muertes naturales de sus principales adversarios, lo que hace sospechar de la existencia de escuadrones paramilitares al servicio del

Gobierno.

El fracaso de las revoluciones de colores, la ausencia de una alternativa fuerte y el crecimiento escalonado del PIB han sido utilizados como narcóticos por el régimen para amansar y amensar al pueblo. No obstante, parece que los ciudadanos comienzan a despertarse de su letargo esto por el aumento de las protestas que se han multiplicado.

En una ocasión y tras la enésima farsa electoral la oposición salió en bloque a la calle encabezando la mayor manifestación que se recuerda de su historia. Viendo que la situación se le iba de las manos, el sátrapa eslavo no dudó en sacar los tanques a la calle para disolver a una turba que aclamaba, de forma pacífica, una mayor transparencia en los resultados. El balance de la represión militar fue de millares de heridos y centenares de detenidos, entre los que figuraban siete opositores. Uno de ellos el proestadounidense Milinkevich que al salir de la cárcel, tuvo que exiliarse por temor a futuras represiones y declaró “haber sufrido torturas en las celdas” y peor suerte corrió el poeta y dirigente de la plataforma “¡Basta ya!”, Vladímir Nekliáev, muy crítico con el poder, que recibió una golpiza que lo dejó en estado de coma.

Teniendo en cuenta que todos estos factores a los que cabría añadir los estragos que está provocando la crisis a la clase media.

Cualquier semejanza con nuestra realidad es pura coincidencia

Gracias.

@chiquenito_2