La Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) planteó tres recomendaciones a las Secretarías de Economía (SE) y Salud (Ssa), así como a la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria (Conamer), sobre el nuevo etiquetado en alimentos y bebidas no alcohólicas para que en las modificaciones que se aprueben en la norma oficial mexicana 051 (NOM-051) se tome en cuenta el proceso de competencia y a las empresas se les permita mencionar los atributos de sus productos.
El pleno del organismo antimonopolios advirtió que el etiquetado debe cumplir con su objetivo original de informar para facilitar una decisión responsable de consumo, pero no debe limitar innecesariamente la competencia entre las empresas, advirtió .
Los consumidores deben contar con información veraz, suficiente y clara sobre el contenido de los alimentos y bebidas que consumen. En el anteproyecto de la NOM-051 se plantea colocar un etiquetado negro y frontal de advertencia en productos con alto contenido de calorías, azúcares, sodio, grasas y grasas saturadas, pero la Cofece se pronunció porque a las empresas se les permita señalar las cualidades de sus artículos, tanto con las etiquetas como mediante otras formas.
El fin es fomentar la competencia entre alimentos y bebidas industrializadas que al mismo tiempo cumplan con la normatividad, indicó.
Así que las tres recomendaciones de la Cofece son que se proporcione al consumidor información veraz, suficiente y clara sobre el contenido de los productos, pero también que se permita a las empresas la señalización y diferenciación sus atributos de calidad, tanto mediante el etiquetado como en otras formas, para que se fomente la competencia entre alimentos y bebidas que cumplan con la norma.
El consumidor requiere más datos diferenciadores sobre los productos
El anteproyecto de modificación de la NOM- 051, referido a la información comercial y sanitaria que debe contener el etiquetado frontal en alimentos y bebidas, estuvo sometido a consulta pública hasta el mes pasado y actualmente la Conamer lleva a cabo reuniones de trabajo con distintos sectores para dar respuesta a sus inquietudes.
El pleno de la Cofece consideró que además de la información sobre los ingredientes de alimentos y bebidas no alcohólicas, el etiquetado también debe “favorecer la capacidad de las empresas para diferenciarse ante los consumidores, así como para comunicarles los atributos de sus productos”, así como su variedad ya que además ello incentiva la investigación y desarrollo en la industria.
“El consumidor requiere más datos sobre las características específicas de cada producto, con elementos diferenciadores, que le faciliten distinguir y elegir el alimento o bebida que más le convenga y que tendrán un mismo sello de advertencia”, explicó la comisión.
Señaló también que el anteproyecto prohíbe que los productos que porten el sello por exceso de alguna de las sustancias reguladas, contengan declaraciones de recomendación o respaldo de sociedades y asociaciones de profesionales.
Riesgo de que se limite la inversión en investigación y desarrollo
Eso “podría limitar la capacidad de las empresas para ofrecer información a los consumidores sobre las características positivas de sus productos y reducir los incentivos de estas para invertir en investigación y desarrollo de nuevos productos, pues sin la diferenciación se dificultaría la recuperación de las inversiones”.
Adicionalmente la Cofece sostuvo que la normatividad debe ser flexible para empresas y productos que apenas ingresan al mercado y que requieren que su marca sea conocida entre los consumidores, porque sino quedarán en desventaja frente a otros competidores ya que el anteproyecto indica que queda prohibido usar personajes, dibujos, celebridades, regalos, ofertas, juguetes o anuncios en redes sociales.
A esas empresas o productos, estableció la Cofece en su tercera recomendación, se les debe permitir “implementar estrategias para promocionar y colocar sus productos en el conocimiento del consumidor”.
Con información de: La Jornada
