Las órdenes de aprehensión giradas en contra del empresario y dueño de Altos Hornos de México S.A., Alonso Ancira Elizondo, y del exdirector general de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya Austin, se derivan de una denuncia que presentó la empresa petrolera en marzo pasado por la venta de una planta de fertilizantes.
Las órdenes giradas contra Lozoya Austin y Ancira Elizodno no se relacionan con el caso de la empresa brasileña Odebrecht, aclaró el fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero esta mañana en entrevista con el periodista Ciro Gómez Leyva en su programa en Grupo Fórmula.
El fiscal Gertz Manero aclaró que “el tema de Odebrecht no tuvo nada que ver”, y detalló que al exdirector de la empresa petrolera nacional se le señala por el presunto delito contenido en el artículo 401 del Código Penal, es decir, se trata de “uso de fondos a través del sistema financiero que son de carácter ilícito para beneficio propio o de terceros”, e insistió en que fue Pemex la que presentó en marzo pasado la acusación que sustanció a través de la Consejería Jurídica de la Presidencia.
Se trata, dijo, de una parte de toda la investigación, pero no es de ninguna manera su fin. La pesquisa que se deriva de la denuncia de Pemex es sobre una adquisición absolutamente ilícita de una planta de fertilizantes.
Cuestionado sobre un eventual amparo que habría obtenido Lozoya Austin para evitar su detención, Gertz Manero dijo que hasta el momento la fiscalía no ha sido notificada oficialmente de ningún procedimiento de esta naturaleza y por ello habrá que esperar a ver “en qué términos viene”, aunque aclaró que en cualquier caso, el presunto responsable y su defensa siempre tienen acceso a todo el expediente para poder defenderse.
Sobre la captura en España del empresario Ancira Elizondo, director de Altos Hornos de México S.A., (AHMSA), el fiscal General subrayó que antes de que se pudiera liberar la “ficha roja” que le hubiera impedido esconderse en aquel país, pasaron 48 horas mientras se revisaba toda la documentación que presentó la Fiscalía General de la República (FGR).
El proceso de extradición, dijo, puede durar alrededor de 45 días, si bien se hará llegar al juez español de la causa toda la información con la que se cuenta, para obtenerla.
Gertz Manero reconoció que hubo tensión en esta investigación, porque “los tiempos nos empezaron a correr muy rápido”, mientras se tenía que obtener toda la información para configurar esta acusación.
Incluso, detalló que por la noche se realizaron cateos en la residencia de Emilio Ricardo Lozoya Austin, pero no se encontró nada. Sólo estaban ahí unas personas a las que se contrató para cuidar el inmueble, quienes no aportaron mayor información.