Hoy estamos viviendo el peor escenario en materia de justicia en México, esto ha llevado a la ciudadanía a hacerse justicia por su propia mano, y que desafortunadamente ha llevado a la muerte a personas inocentes, los jueces no están cumpliendo con su trabajo, son personas que han llegado a esos puestos por compadrazgos o lazos familiares y que están dispuestos a recibir dinero a cambio de dejar libre a los delincuentes, o bien los dejan libres solo por omisión o por incompetencia, aunado a esto, el Nuevo Sistema de Justicia Penal Acusatorio deja mucho que desear, es una falacia, está hecho a la medida de los delincuentes y en contra del ciudadano honesto.
Los jueces han liberado a homicidas, asaltantes, secuestradores, violadores y demás delincuentes peligrosos, la sociedad ha hecho una evaluación del desempeño de los jueces y obtuvieron una calificación reprobatoria, esto en verdad es alarmante. Si bien, para ser designado juez se debe participar en un concurso que incluya, entre otros aspectos, un examen teórico, una entrevista, valoración de preparación académica, trayectoria profesional, y exámenes de control de confianza y que de nada sirven.
Voy a poner algunos ejemplos estólidos sobre la pésima actuación de los y las jueces: una jueza consideró que un cuchillo de cocina no es un arma, dijo que el cuchillo es un utensilio de cocina. Otra jueza reclasificó un delito de “secuestro” a “privación de la libertad”, que se les imputó a los delincuentes, expolicías municipales que, a punta de pistola, le dijeron a su víctima “esto es un secuestro” y lo mantuvieron privado de su libertad, sin embargo, como no se concretó la solicitud de dinero a la familia, la jueza determinó que no había elementos suficientes para vincularlos por secuestro. Esto cambió la posible sentencia de 40 a 80 años, a un máximo de siete años y un mínimo de tres años de cárcel. Así como estos ejemplos existen miles de casos.
Actualmente la salida fácil para que los jueces dejen en libertad a los delincuentes y poder recibir su moche es la argumentación sobre las fallas en el proceso de investigación a pesar de ser delincuentes de alta peligrosidad detenidos en flagrancia, confesos con un largo historial delictivo.
Considero urgente y de suma importancia que alguien del Poder Judicial nos explicara el por qué se están liberando a los delincuentes.
La gran exigencia actualmente es para las autoridades, para que capturen a los delincuentes que tanto daño nos hacen, que la ola de violencia se acabe, que hagan su trabajo para que podamos vivir tranquilamente, pero, aquí está el pero, ¿y los jueces?
Ellos se creen intocables, seres supremos que están en su pedestal ganando miles de pesos por parte del gobierno y por parte de los delincuentes que se mochan para que los dejen en libertad, sería muy saludable que bajen de su nube en la que están y nos expliquen qué está pasando, porqué liberan a los criminales, porque nos dejan a su merced.
Esta impunidad está colmando a la sociedad, y entre los jueces corruptos y el nuevo sistema penal acusatorio hecho a la medida de los delincuentes estamos jodidos.
Otra variante de este importantísimo, lastimoso y penoso asunto es que tanto policías como soldados y marinos arriesgan su vida al capturar a los criminales y que además de su propio riesgo, está el de sus familias; porque una vez libres los delincuentes las venganzas no se hacen esperar.
Esta corrupción, omisión, falta de ética, de profesionalismo, de moral, de principios por parte de los jueces ha ocasionado a que tengamos miedo a denunciar ya que, a parte de los malos tratos de los ministerios públicos, una vez que el juez deja libre al delincuente nos va peor porque van a buscar venganza.
Según datos del periódico universal en el año 2017 han salido 12 mil delincuentes.
Ahora veamos la parte de los dineros, el Poder Judicial mexicano es el más costoso de toda América Latina, derivado de los altos sueldos de magistrados y jueces, quienes llegan a percibir sueldos de hasta 600 mil pesos, además adicional a su salario mensual, cuentan con un pago por riesgo que se otorga en función de “la naturaleza, complejidad y responsabilidad de las funciones que tienen encomendadas”, esta prestación puede superar el medio millón de pesos anuales.
Entre sus prestaciones y remuneraciones, está el disfrute de 30 días hábiles de vacaciones al año, seguro de gastos médicos mayores que cubre cirugías, hospitalización, consultas, medicamentos, análisis clínicos, tratamientos dentales y reposición de lentes, seguro de vida, ayuda para servicios funerarios, inhumación o cremación, hasta por 30 mil pesos, un seguro de vida institucional equivalente a 40 meses de sueldo básico, con opción a una potenciación de hasta 108 meses con cargo al trabajador, seguro de separación individualizado que les brinda un apoyo en caso de separarse del servicio público y mientras se reincorporan al mercado laboral, además tienen estímulos por antigüedad, ayuda de despensa, Prima quincenal, estímulo del día de la madre y del padre.
Además, el mantenimiento de casas de jueces y magistrados es un gasto más que se carga al erario. En tres años, el Consejo de la Judicatura Federal (CJF) ha retirado 49 millones de pesos de un fideicomiso para este fin.
El Consejo de la Judicatura Federal administra el Fideicomiso para el mantenimiento de casas habitación de magistrados y jueces, que fue constituido por el Poder Judicial para la adquisición de inmuebles esto con el fin de proporcionar vivienda a aquellos impartidores de justicia que son llamados a laborar en otras partes del país.
En conjunto, el Poder Judicial destina para estos privilegios más de 10 mil millones de pesos de su presupuesto de 71 mil millones.
Urge hacer una limpia, la pésima actuación de las y los jueces en el desempeño de sus funciones así lo exige.
Me despido con dos frases, la primera de “Montesquieu” y la segunda de “El Talmud”
“Una cosa no es justa por el hecho de ser ley. Debe ser ley porque es justa” Y
“Desgraciada la generación cuyos jueces merecen ser juzgados”
Gracias
Chiquenito_2