Dentro del mundo kafkiano que tenemos en México, se hallan 223 diputados, del PAN, del PRI, del PRD y de MC, que el pasado 17 de abril votaron en contra de una reforma constitucional que trataba de parar los abusos de empresas extranjeras del sector eléctrico, en México.Estas y estos diputados no pueden no saber que la generación de energía eléctrica en nuestro país, por parte de privados, está dominada por empresas extranjeras.
Votar en contra de la reforma constitucional fue votar a favor de los intereses de las empresas españolas Iberdrola, Naturgy, Fisterra y Acciona; fue votar a favor de los intereses de las norteamericanas Saavi, Sempra, Techgen y Aes; significó favorecer los intereses de las japonesas Mitsui y Mitsubishi; votaron a favor de los intereses de las británicas Contourglobal y Atlantica; votaron a favor de los intereses de la italiana Enel, de la francesa Engie, de la coreana KST y de la portuguesa Mota-Engil.
Lo anterior ni siquiera debería estar a discusión. Votaron a favor de los intereses de empresas extranjeras y en contra de los intereses de las familias mexicanas, punto.
Dichos legisladores deberían asumir, como adultos, las consecuencias de su voto. Pero no.
Ahora resulta que, como el famoso meme, se hacen las “vístimas” y se quejan de una “campaña de odio” o de “calumnias”, todo porque se les ha exhibido y se les está exhibiendo con base en el sentido de su voto.
En vez de quejarse, deberían dar la cara a sus supuestos representados y explicar por qué votaron a favor de intereses extranjeros.
En el colmo, priístas y panistas acudieron a quejarse ante el INE y, lógico, ninguna sorpresa, el INE les dio la razón y ahora el INE pretende que a los traidores a la patria ¡no se les llame como tales! Y usa una falacia para ello, pues señala que el código penal federal tipifica el delito de traición a la patria y que ningún juez ha determinado eso, como si la categoría de traición a la patria fuera única y exclusivamente jurídica y no política.
Es más, primero es una categoría política y después una jurídica.
Con esta actitud, consejeras y consejeros del INE se ponen a defender a traidores a la patria y pretenden convertirse en censores.
¿O es que tampoco consejeras y consejeros del INE saben que el control de la generación de energía eléctrica en México, por parte de privados, está en manos de extranjeros? ¿O lo saben, pero eso los tiene sin cuidado?
Presidente del Consejo Estatal de Morena