El pasado viernes 21 de abril del 2017, Radio AMLO transmitió a las 12:00 del día el programa “MORENA Va”, en el que la conocida Tuiteramx tuvo de invitado a Alberto Betancourt, de la emisión Mundos Posibles de Radio UNAM; tocaron el tema de los jóvenes en México y lo enfocaron desde el punto de vista político, al señalar un hecho que la mayoría de nosotros conocemos: hay un desencanto generalizado en la juventud del país, por todo lo que huela a política. Y no es para menos ¿qué pueden interesarle a un joven, partidos tan corrompidos como el PRI, el PAN, el PRD, el Verde Ecologista y demás satélites menores? Nada; un joven que a través de su familia, ha visto el deterioro general del país y conoce que la causa principal de esta tragedia, está en la nula honestidad y honradez de esas instituciones, no puede ni creer en ellos, ni en los mensajes de cambio que prometen en cada periodo electoral. Sabe que todo es simulación y que el país seguirá su ruta descendente, para beneficio de unos cuantos y pobreza generalizada en el resto de los mexicanos. La política se vuelve entonces una institución sucia y repudiable, en la que no es posible creer y lo más conveniente entonces, es alejarse totalmente de ese contacto pernicioso.
A grandes rasgos, esta es la posición en la que se encuentra un joven que despierta a la vida ciudadana y adquiere con esto sus derechos políticos. El desencanto no puede ser mayor. ¿Y qué puede hacer al respecto? Lo que le corresponde hacer a la juventud: informarse, para poder transformar al país en algo mejor.
Ser joven significa iniciar un periodo de vida en el que la energía física y el desarrollo mental, están en su total apogeo; un joven tiene toda la intención de aplicar esa energía sobre algo que reditúe en beneficio propio, en beneficio del núcleo familiar y de la sociedad en su conjunto. Para eso un joven trabaja, estudia, pregunta, se informa y comenta dentro de su entorno, obteniendo las respuestas que determinarán el rumbo de su vida futura. Desde ahí está haciendo política, ya sea aceptando todo lo que se le brinda, sin cuestionamiento alguno, o inconformándose con la visión y práctica política que recibe de sus mayores. Cualquiera de esas dos posiciones significa una postura política y de acuerdo a ella, se pensará y actuará en adelante.
Esto quiere decir que, de una manera u otra, todos participamos en política; aceptando lo existente, o pretendiendo dar nuevo rumbo al país, por estar en desacuerdo con las reglas establecidas. En realidad, en lo política solo existen dos clases de ciudadanos: los activos y los pasivos; los que actúan y lo que dejan pasar las cosas sin luchar.
¿Qué es lo que ha hecho la clase política del PRIAN hasta la fecha? Pues fomentar el crecimiento de la sociedad pasiva, por todas las vías a su alcance; al sistema le conviene que exista ese núcleo social joven, que nace desencantado y sin interés alguno por participar en las tareas de organización y administración pública. Ese segmento de jóvenes que piensan que la política es una actividad sucia, cuando los únicos sucios son los políticos del momento. Si hay una palabra a la que el corrupto sistema político le tiene miedo, esa palabra es “cambio”; un corrupto sabe que si lo sacan de su madriguera, muere; por eso pelea a muerte porque todo se mantenga igual. Sin embargo y por naturaleza, el joven anhela el cambio; desea realizar sus sueños y para ello debe modificar las reglas establecidas; sobre todo, si se encuentra involucrado en una sociedad que sufre de inequidad, desigualdad, inseguridad, corrupción, etc. La palabra clave entonces es cambio; pero para entender lo que realmente significa, un joven debe informarse, cerrar sus oídos a la propaganda oficial y enterarse directamente de lo que está pasando en su calle, en su colonia, en su municipio y en el país. Hoy las Redes Sociales son un instrumento invaluable para conocer la realidad nacional y ubicar con certeza dónde se encuentra el frente de combate que encara al sistema. La verdad es inocultable y tarde o temprano, un joven que busca se encuentra con ella. Ni la política es sucia por naturaleza, ni todo político llega con su historial de corrupción al momento de nacer; los corruptos se hacen sobre la marcha, pero existen personajes que rompen con esta regla. El consejo para los jóvenes, sería el mismo que han recibido todas las juventudes que se han parado sobre la Tierra, desde el inicio de la Historia: hay que buscar el cambio cuando las cosas no funcionan y hay que pelear duro por ello. Para esto, es necesario estar informado y las Redes Sociales son un buen inicio. En ellas encontrarás diferentes puntos de vista y conocimientos amplios sobre este tema. Ahí por cierto y por si te interesa, encontrarás cuál es la propuesta de Morena en su lucha frontal contra las políticas criminales del PRIAN. Porque hoy, este Partido, se encuentra en la primera línea de combate, para cambiar a México. Infórmate.